La industria de la tecnología y del desarrollo de software está cambiando.
En un reciente artículo del International Journal of Information Processing and Management se plantea que hoy este sector prioriza identificar los deseos y necesidades del usuario o usuaria, es decir, que se centra en la percepción del diseñador de lo que el usuario quiere y la percepción del usuario de lo que realmente necesita. Por ello, se hace necesario que los profesionales desarrollen tanto hard skills como soft skills, entre ellas la colaboración, la empatía, la autonomía y las habilidades para la comunicación.
Es en esta lógica, contar con un liderazgo diverso y en especial con mayor participación de mujeres, permite tener una mejor ponderación de las diferentes necesidades de los clientes y combinar una variedad de miradas a la hora de buscar soluciones tecnológicas.